Hay destinos increíbles, en plena naturaleza y llenos de aventura y diversión, y todos en nuestro país. Si buscás hacer una escapada distinta, mirá los lugares mágicos que podés descubrir.
Los lugares exóticos no solo están a miles de kilómetros de casa, muy cerca podés encontrar paisajes únicos y naturaleza que sorprende.
Las yungas en Jujuy
¿Conocés las yungas? Una selva que se encuentra en las montañas, en zonas de altura, y sorprende por su vegetación exuberante y su vida. La yunga jujeña no es uno de los destinos más conocidos de la zona pero vale la pena descubrirlo. Luego de la selva misionera, este sitio representa el de mayor biodiversidad del país.
El Parque Nacional Calilegua y el Potrero de Yala son los parques jujeños donde podrás encontrar este y otros atractivos. Allí podrás realizar trekking, cabalgatas y avistaje de flora y fauna.
Esteros del Iberá
Es, sin dudas, el atractivo natural más grande de Corrientes. Para muchos, completamente desconocido. Es el segundo humedal más grande del mundo, el más importante del país y una reserva de vida única. Aquí vas a poder encontrar una enorme variedad de flora y fauna, conviviendo en un ambiente natural muy especial.
Para visitar los Esteros del Iberá, lo más recomendable es hospedarse en Ituzaingó o Colonia Carlos Pellegrini. Las localidades cercanas están preparadas para un turismo pequeño y es un lugar ideal para aquellos que realmente disfruten de la vida natural. En los Esteros no hay comodidades ni servicios, solo naturaleza en estado puro.
El otoño es la mejor época para visitarlo, cuando las temperaturas empiezan a bajar y los días aún son largos y lindos.
Bosque Petrificado Sarmiento
Un paisaje casi lunar, misterioso y en medio del desierto patagónico, te va a sorprender. Es un sitio muy interesante, de 300 kilómetros cuadrados, pero poco conocido por los turistas que llegan a Chubut. Se trata de un área protegida de fósiles vegetales con una antigüedad de millones de años. Aquí podrás apreciar semillas, hojas y árboles de la época de los dinosaurios, hoy convertidos en fósiles, en lo que fue un bosque en otra época.
El área de visita está delimitada y fuera de esa zona, el terreno es poco firme por lo que no debe salirse de los senderos. El clima es hostil y en la zona no encontrarás servicios o comodidades, por lo que solo es adecuado para los más aventureros.