“Compré con meses de anticipación aprovechando una oferta de vuelos. Ya tenía todo reservado, había contratado con tiempo los traslados para ahorrar. Y finalmente, seis horas antes de abordar el avión me llegó un mail anunciándome cambio de vuelo y no solo eso, también de aeropuerto. Así fue como mi vuelo que salía de Aeroparque a las 11 AM pasó a ser uno que salía de Ezeiza a las 8. Horas que pueden parecer insignificantes pero para mi, con chicos muy chiquitos, viviendo muy lejos, significaba un cambio brutal. Salir a 4.30 AM para cruzar media provincia y llegar a tiempo. Además de haber perdido los traslados que tenía contratados (uno de ellos sin reembolso).” ¿Qué había pasado? La respuesta era simple, el vuelo estaba sobrevendido.
Pero, ¿por qué se hace esto? El overbooking (o sobreventa de pasajes) es una práctica habitual en la industria aerocomercial, porque en el área de servicios no se puede “stockear” y vender más tarde, cada asiento vacío representa pérdida, por eso, las aerolíneas se cubren vendiendo más lugares de los disponibles. Para ello, se realizan cálculos que dan una aproximación de los pasajeros que podrían no tomar el vuelo. Se tiene en cuenta también fechas especiales, fiestas, vacaciones, etc. y en base a esto, determinan el número de asientos extra que pueden ofrecer. Claro, a veces las previsiones fallan.
Hay rutas y días en particular donde es más probable que ocurra el overbooking. Los vuelos de los lunes por la mañana y viernes por la noche suelen ser más tomados por viajeros de negocios y esto hace que la posibilidad de quedarse sin lugar sea aún mayor. En cambio, en rutas turísticas las posibilidades son menores aunque la sobreventa sea similar, porque puede haber más cambios y no shows (personas que no se presentan). Muchos turistas eligen pasajes flexibles, que le permitan modificar las fechas u horarios.
Gracias a Internet y las nuevas tecnologías, hoy todo es más fácil. Las aerolínea pueden estar seguros que vendieron demasiados pasajes con horas y hasta días de anticipación y avisar con tiempo (aunque no siempre ocurre). Se ofrece al pasajero un vuelo alternativo, en la misma fecha y en un horario cercano al que se había elegido. El pasajero puede aceptar o pedir que se reembolse su dinero. De todas formas, los pasajeros que sí aceptan pueden exigir una compensación por las molestias ocasiones por el cambio de planes (que todas las aerolíneas brindan).
¿Es posible evitar esta situación? Sí. Hoy podemos evitarlo con el check in web o móvil. La mayoría de las aerolíneas permiten realizar el check in con 24 horas de anticipación (algunas hasta 36 horas antes). Una vez impresa la tarjeta de embarque, el pasajero ya está a bordo.
¿Tuviste alguna vez una experiencia de overbooking? ¡CONTANOS tu experiencia y ayudá a otros viajeros!